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Se adueñan de las banquetas

En La Azucena y en todo el municipio de El Salto y Juanacatlán, es común de ciudadanos expandan su casa, en contra del reglamento; Ayuntamientos hacen caso omiso
Se adueñan de las banquetas

Cada mañana miles de personas se levantan para acudir a sus trabajos, escuelas, hospitales u otros lugares, la mayoría de ellos no cuenta con automóvil propio y el simple hecho de caminar aunque sea a la parada del camión se está convirtiendo en un problema.

 

Espacios públicos, vía publica, peatones, son conceptos que se relacionan entre sí y se refieren al libre acceso que tienen los peatones a transitar con seguridad por las zonas destinadas a ello, es decir, las banquetas y calles. En El Salto parece que estas palabras no se respetan, pues son ya muchos casos de banquetas obstruidas por los mismos ciudadanos que se quejan de accidentes que van desde una caída a un accidente grave al tener que circular por donde no deberían.

 

Cada individuo tiene el derecho de construir su residencia de la forma que desee conforme los requisitos establecidos por el Ayuntamiento y la Dirección de Construcción y Obras Públicas, las cuales dictan que cada banqueta debe estar constituida por tres partes, la primera es denominada “Franja peatonal” que es donde transita la persona y nos dice que dice que el ancho mínimo de este espacio debe ser de 1.50 mts; la “Franja de la fachada” debe ser de .60 m en adelante y la “Franja de equipamiento” (áreas verdes, señalamiento y mobiliario) debe oscilar entre .60 o 1.20 m. Con esto se deduce que una banqueta promedio debe medir entre 1:30 m a 2:30 metros.

 

Sin embargo, los ciudadanos de El Salto han optado por saltarse este reglamento invadiendo sin medida las banquetas, lo que no solo es apropiamiento ilegal de zona pública, sino que es un problema de tránsito para los peatones que se ven forzados a caminar por las calles poniendo en peligro su integridad al enfrentarse a automóviles, camiones y además, a las pésimas condiciones que éstas presentan al estar llenas de baches, ser solo tierra o empedrado.

 

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