Urgen a combatir zancudos

Millones y millones de zancudos están "enloqueciendo" a los habitantes de El Salto y Juanacatlán.

Las aguas contaminadas y estancadas del Río Santiago son una interminable "fábrica" de mosquitos que mantiene intranquilo al pueblo y que aunque no se han reportado enfermedades transmitidas por estos insectos, la posibilidad siempre está latente.

La cadena alimenticia se rompió con la grave contaminación que aqueja las aguas de la Cuenca del Ahogado. A falta de depredadores de las larvas, los zancudos se reproducen libremente aprovechando el lirio y las aguas sin movimiento.

Gobiernos municipales se han visto rebasados en la problemática. Los recursos no alcanzan, o no se enfocan, y a nivel Estatal no han llegado los apoyos necesarios para mitigar de manera importante.

Este no es un problema nuevo. Desde hace años la sociedad ha sufrido un deterioro de su calidad de vida por esta razón.

A todas horas, en ambas cabeceras de pueden apreciar "enjambres" de zancudos en prácticamente todos los sitios. La gente de ambos pueblos estaba acostumbraba a salir por las tardes a platicar al portón de sus casas, pero eso ya es casi imposible de disfrutar.

Dentro de la Clínica Número 5 del IMSS ubicada a unos metros del contaminado Río Santiago, no hay que permanecer inmóvil si se quiere no ser atacado por millones de zancudos.

Enfermos y bebes tienen que sortear con lo que se tenga al alcance para no ser "comido vivo".

"Han fumigado dentro de las instalaciones y se sacó de cada habitación un recogedor lleno de zancudos, pero lo malo es que al día siguiente ya están de nuevo", dijo un trabajador de la Clínica.

Para los habitantes de la localidad, ha resultado un suplicio “convivir” con los zancudos: pabellones, insecticida, citronela, plaquitas, ventiladores, es tan solo una parte del arsenal de defensa que utilizan para defenderse.

"Es una situación insoportable y los enjambres están por todos lados, no solo en el río. 2017 y lo que va del 2018, han sido los peores, nunca antes hubo tantos", expresó una habitante de Juanacatlán.

“Está insoportable esto de los zancudos y es a todas horas en tu casa ves los enjambres por todas partes todo el día, ¡por favor que ya hagan algo nunca antes se había visto esto ya se salió de las manos”, escribió en redes sociales, de manera desesperada, Alis Galván.

Juanacatlán toma la iniciativa

El Ayuntamiento de Juanacatlán, a través de Servicios Médicos Municipales ya implementa acciones para mitigar el problema de la proliferación de zancudos.

El ciclo de vida de este mosquito que prolifera en la zona es de 7 días en promedio, por lo que la fumigación por sí sola, no tendría un efecto trascendente ya que en una semana volvería a reproducirse por millones.

Tomando en cuenta eso, el Ayuntamiento decidió implementar un programa novedoso, que ataque de manera integral el problema.

Acciones como descacharrización, trillar el lirio, fumigación sistemática y estratégica serán parte del programa.

Pero también se gestiona la instalación de dispositivos prototipos de la empresa americana Dynamic, en el que sería Juanacatlán el primer municipio en poder probarlas, según informó David León Cortés, Director de Servicios Médicos Municipales y Protección Civil del Ayuntamiento de Juanacatlán.

“Tuvimos una reunión con ellos hace unas semanas y el prototipo es una especie de lámparas que trituran el zancudo, fueron previamente usadas en Florida, posterior al Huracán ya que debido a las inundaciones se proliferó el mosquito transmisor del zika y se evidenció mediante estudios técnicos la disminución considerable de la presencia del mosquito”, explicó León.

“En ese punto aún estamos en platicas con la empresa y confiamos e que nos apoyen para solucionar este problema”, indicó.

Por parte del Ayuntamiento de El Salto, no se han anunciado acciones para paliar la proliferación de zancudos.

Más molestia que transmisor

El tipo de zancudo que se prolifera en las aguas contaminadas del Río Santiago es principalmente del tipo cullex que no es conocido por ser transmisor de enfermedades como dengue, zika y chikungunya.

Se trata más de una molestia sanitaria por la roncha que produce en la piel, aunque no se debe de menospreciar el problema ya que la situación podría cambiar.

Esto ha sido una causa para que la Secretaría de Salud Jalisco no había autorizado un mayor recurso para fumigación.

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