La arquitectura patrimonial
Todo lo que consideramos como “patrimonial” es –por definición mía- producto de una catalogación que se aplica a elementos de características singulares que se vuelven representativos y que otorgan identidad al lugar donde se sitúan.
El Salto y Juanacatlán poseen elementos de gran relevancia histórica. Más allá de sus tradiciones y costumbres, la arquitectura es el ámbito que lamentablemente no hemos valorado en estas dos poblaciones a pesar de su riqueza en este género. Esta actitud ha prevalecido desde hace siglos y no hemos sabido valorar nuestra cultura.
Los verdaderos ejemplos de arquitectura patrimonial en estos municipios, están en el olvido. En El Salto, a pesar de poseer numerosas estructuras de relevancia histórica, la antigua Hacienda de El Castillo es el espacio que más olvidado se encuentra.
En Juanacatlán, el antiguo acueducto de la Hacienda de La Aurora permanece inaccesible y abandonado.
Estos sitios representan y podrían dignificar a nuestros municipios. El vandalismo, demoliciones, y modificaciones contra la arquitectura patrimonial son algunos de los problemas que destruyen estos monumentos.
Parecería atrevido el proponer que los edificios históricos estuvieran alejados de nosotros, al otro lado del mundo para así evitar su deterioro. Sin embargo, si fue el hombre quien construye, ¿quién mejor para admirar y valorar su creación?
Propongo comenzar a rescatar toda esta arquitectura realizando recorridos, para descubrir, admirar y aprender de lo que el tiempo ha querido que sobreviva, creando una verdadera educación cultural y así darnos cuenta de que estos frágiles recursos contribuirían a designar a estos municipios en una zona mágica.
¿Cómo conservar nuestro patrimonio? Difundiendo nuestra historia.