Soñé que vi a Zapata
Soñé que vi a Zapata
irónicamente, caminado de pata
en un desierto, arena en su cara
pero con ojos grandes, como de plata
le dije, “¡Oye, jefe! ¿Qué tal? ¿Qué pasa?”
no me miro, no me dijo nada
finalmente vio mi camisa, bonita y de marca como si fuera del otro lado de la batalla
“este es un desierto, no una playa,” suspiro, pero yo le dije, “¡Vaya!
!Eres más enojen que en las murallas!
Yo soy tu fanático, tu — mi héroe sin fallas”
escupió y siguió su caminata
pistolas en sus caderas, pesadas y empolvadas “¡No sabes la hambre! ¡Prometida es tu mañana! Me conoces en libros pero eres de la matanza.”
de repente amanecí, me puse la corbata
fui al trabajo — profe de la historia Mejicana luego, a un bar de moda llamado la Panza con mis compañeros, intelectuales y literatas
comimos pastel, nos tomamos unas vodkas
por la tele, no pude oír lo que mi amigo alegaba en las noticias hablaron de rebeldes en montañas y al jefe le grite, “!Por favor! !La tele! !Apágala!”
Sobre el autor: Sobre el autor:
Julián Martinez es un poeta mexicano-estadounidense viviendo en Chicago, IL, USA. Tiene veintiún años y es el hijo de inmigrantes mexicanos. Esta completando su ultimo uño de estudio en la Universidad de DePaul. Su escritura se puede leer en publicaciones como Juked, Pueblo de 14 East, donde trabaja como editor, y otros. ¡Viva El Salto!